HE VISTO flarios, he visto gramias, he visto atruces, he visto gorriones averiados que llevaban una tirita en su quinta ala, caballos que corrĂan en el locodromo con una pata de repuesto en la boca, baobabs que estiraban los brazos dentro de una botella de ginebra, mi cerebro ama la curva y la máscara, mi cerebro cumple todos los dĂas quince años y es una gacela, mi cerebro es un galgo que odia a su profesor y a su policĂa, odio a mi erudita, odio a mi moralista, odio a mi monja que siempre busca vĂctimas con una linterna, odio a mi robot buzo que mastica atlas y diccionarios, odio a los aguacates en serie, a los modelos de la belleza repetida, a las penĂşltimas moscas ahora gimnastas que vuelan con dorsal a la espalda, solo busco amapiedras, solo busco alogrifos, solo lugares hartos de ser lugares a los que Google Maps no haya llegado, solo animales susto que sean indetectables por los radares de Wikipedia pero es en vano, quĂ© ganas de gritar tengo, ganas de gritar balabrof, ganas de gritar cadabul, ganas de gritar basta, basta de lobos de cartĂłn aullando a lunas prematuras y cansadas, basta de nĂşmeros bien peinados cruzando la manoseada autopista de los mercaderes, solo quiero que respetĂ©is la grandeza tierna de la noche mientras me dejáis estornudar despacio, solo quiero que callĂ©is todos por un momento y que ninguna ventana se abra, no quiero guerras ni luces mientras me como esta naranja, callaos todos y respetad por favor a esta naranja mĂa, sin armadura y sin decibelios, esta naranja.